Crónica de temporada

Lisboa, ciudad mágica a la que siempre deseas volver, con su circuito costero desde Cascais, duro por sus continuas subidas y bajadas, fue el primero de los retos afrontados. Prepararlo en verano exige un plus de compromiso, buscando horas para entrenar donde las temperaturas no sean insoportables. La solución: madrugar. Formar parte de un grupo de WhatsApp que se llama "Corredores 05:45", lo hace más fácil. Gracias chicos; eso sí, no tenéis remedio. Aprovecho para advertir que el número de corredores que han encontrado en esas horas las que les permiten entrenar con regularidad, ¡y acompañados!, es cada vez mayor. Ya no somos cuatro gatos los que recorremos las calles de nuestra ciudad a las 6-7 de la mañana, tanto en verano como en invierno. La marca en meta no estuvo mal, 3:22:40, más aún teniendo en cuenta que el siguiente reto era tan sólo 2 semanas después. En el recuerdo quedarán para siempre los momentos disfrutados ese fin de semana con Matias Davila Delgado y Yasnier Rizo Perez , y junto a nuestros hermanos Asfas: Juan Cardesa y David Arasa Duarte . Una anécdota: tan sólo 12 horas antes de la salida, la Organización adelantó una hora la misma, por las temperaturas que se esperaban a media mañana. Cuando empezamos a recibir los e.mails anunciando el adelanto, pensamos que era una broma , pero no, no lo era. Afortunadamente, fuimos con tiempo suficiente para salir a la nueva hora fijada.

Preparar un maratón es más difícil que correrlo. Así que una vez preparado, ¿Por qué no aprovechar el esfuerzo hecho para disfrutar de un segundo e incluso un tercero?.

Así que tras Lisboa, allá que nos fuimos a Ciudad Real, Raul Montero Leon y yo. En esta ocasión no vino el infatigable Matías, que con maestría organizaba ese mismo día una nueva edición de una de las medias maratones con más solera de nuestra región, la de la Virgen de las Cruces en Don Benito. Es la de Ciudad Real una carrera parecida a la nuestra de Badajoz, organizada con esmero, con mucho corazón y sabiendo que los inscritos y entrados en meta difícilmente conseguirán superar los 500 corredores. A mi entender, es un acierto abrir la participación el mismo día a los 21 kilómetros, pues el número total de corredores que recorren las calles el día de la prueba, cerca de 1500, justifica los esfuerzos de organización y económicos realizados. Tampoco salió mal la carrera y conseguí lo pretendido: mejorar el tiempo de Lisboa, acabando en 3:15:52. Mientras el cuerpo aguante, seguiremos apoyando esta "maratón de provincias", que trata al corredor popular con la cercanía que otras carreras no pueden hacer. Como anécdota, puedo decir que he tomado la salida en esta carrera 4 veces y he entrado en meta 3, sin haberme retirado nunca. La explicación: este año hubo "salida nula" y tras los 200 primeros metros del recorrido tuvimos que volver a la línea de salida, pues no estaban aún cortadas al tráfico las calles por las que transcurría la prueba.

El mes de noviembre hubo tiempo de recuperar y coger energías para el siguiente reto. Por motivos personales ("Correr es lo más importante de las cosas secundarias") no pude acompañar al Club Maratón Badajoz a la Maratón de San Sebastián, y tuve que esperar a diciembre para volver a colocarme el dorsal. Málaga, como dice Tino Lopez Bueno , es ya "un clásico", una de "las básicas", como dice Manoli, la mujer de Matías. Con Raúl y Matías, como no podía ser de otro modo, fuimos a disfrutar del ambiente navideño de una ciudad a la que algunos consideran ya la de más pujanza de Andalucía. Correr se convierte en este caso en el remate de un fin de semana turístico al que hay que ir con toda la familia. Además, pudimos compartir la alegría con los aceberos Susana Cerdán Alguijo , David, Antonio López Carpio , Lali María Eulalia Hernández Fernández y Ñoño,.... De nuevo el objetivo se vio cumplido y mejoré el tiempo final de las dos anteriores, entrando en 3:14:28.

Como si de vacaciones escolares de Navidad se tratase, la temporada de maratones la divido en dos: una primera mitad de septiembre a diciembre; y una segunda de febrero a abril. Importantísimo, aprovechar el periodo navideño para descansar de los kilómetros acumulados y reponer grasas con las comidas y repostería típicas de esas fechas. Que a nadie le preocupe coger un par de kilos; seguro que los vamos a soltar rápidamente en cuanto nos volvamos a poner en marcha.

Tras el parón navideño nos fuimos para Sevilla. Con ésta son ya 19 ediciones corridas en esa ciudad a la que regreso ilusionado cada año recordando los años allí vividos (unos cinco). En este tiempo hemos visto evolucionar la prueba desde un modelo con pocos participantes, escaso público, muy asequible económicamente y un trato relativamente cercano, a otro con una masiva participación, numeroso público disfrutando de la carrera pero que requiere al corredor un esfuerzo económico mayor y planificar la inscripción con mucha antelación. Sinceramente, creo que el esfuerzo ha merecido la pena y se ha convertido en una de las grandes, no sólo a nivel nacional. El trabajo de Rodrigo Gavela y muchos otros ha dado sus frutos. Aquí solemos coincidir entre 15 y 20 corredores del Club, así que las comidas pre y post carrera son ya todo un clásico. Entrar en meta en 3:22:16 me dejó un buen sabor de boca, a pesar de haber sufrido, una vez llegado al final, los desagradables efectos rebote derivados de la ingesta de geles, que parecían volver a aparecer tras numerosas pruebas sin presentarse.

En marzo tocó conocer una de las Majors, Boston, animados por Juan Manuel Ángel Ávila que casi ocho meses antes nos lanzó a realizar los trámites necesarios para hacerse con un dorsal. Por suerte pudimos comprarlo por nuestra cuenta, lo que nos permitió participar con un desembolso algo menor de lo habitual. Viaje perfectamente organizado por Raúl, que junto a Matías cerraba el equipo. Allí en EEUU se encontraban también Antonio López Carpio y Dani Daniel Corbacho , siendo por tanto seis los residentes en Badajoz que tomábamos la salida. Carrera curiosa por celebrarse un lunes, el día del Patriota, festivo, y que durante todo el fin de semana previo disfrutaba de un ambiente deportivo inigualable. Ya el sábado parecía ser el día de la carrera y de la misma manera ocurrió el domingo. Los bostonianos entienden como algo suyo el maratón y lo celebran y disfrutan tanto como los que lo corremos. Nunca había visto tantísimo público durante los 42 kilómetros del recorrido, y tan volcado con el corredor. Sin lugar a dudas, habrá que volver. Posiblemente cegado por los aplausos de los primeros 25 kms, unido a los días de turismo previos y a que el circuito es especialmente duro entre los kms 25 y 35 (acaba aquí con una cuesta conocida como "la rompecorazones"), pasé una segunda mitad de carrera difícil, al borde del abandono, y que conseguí sacar adelante gracias a los ánimos del público. Finalmente se convirtió en el segundo maratón más lento de los 77 que llevo finalizados: 3:42:23. Y volvió a aparecer el indeseado efecto rebote por la ingesta de geles. Aún así, me traje el mejor recuerdo de una carrera que hasta hoy tengo.

Y para finalizar la temporada, otro clásico: Mapoma, Maratón Popular de Madrid. Acompañado de más de 20 compañeros del Club, participación número 17 en esta ciudad. Tras el susto de Boston, tocaba recuperar confianza así que salí con prudencia, buscando llegar a meta con buenas sensaciones. Decidí no tomar geles esta vez y creo que acerté. El objetivo lo fijé en tres horas y media y acabé en 3:30:13, así que muy satisfecho. Lo mejor, la compañía, amigos de afición disfrutando de un fin de semana haciendo lo que más nos gusta.

Y así finalizaba la temporada de maratones 2023-2024. Como dice Maíno, "ya he empezado a preparar la siguiente temporada y lo he hecho, tomando unas semanas de descanso", en mi caso hasta julio. El objetivo de la siguiente será el mismo que he conseguido en ésta que termina : disfrutar corriendo, disfrutar con los compañeros de afición y viajar, a ser posible acompañado de la familia. Y ojalá pueda seguir haciéndolo durante muchas temporadas más.

No quiero dejar de citar el hecho más inesperado y feliz que me ha ocurrido durante esta temporada: mi hija Nuria ha empezado a correr y a día de hoy ya lleva dos medias maratones; en Zafra hará la tercera. Le deseo que disfrute tanto como yo lo hago y que le permita conocer tantas excelentes personas como yo he tenido oportunidad de conocer.